En Capira instalaron un puesto de control.
Volver a erradicar al gusano barrenador del ganado (GBG) le tomará a Panamá de dos a cuatro años, y será un trabajo en conjunto entre productores y autoridades.
De acuerdo al director general de Copeg, Enrique Samudio, en julio próximo comenzará a operar la quinta avioneta con la que se planea dispersar más moscas Cochliomyia hominivorax estériles.
El representante de la Copeg indicó que unas provincias están más afectadas que otras con las gusaneras. La mayoría de los casos de GBG han sido detectados en orden de importancia en la provincia de Chiriquí, seguido de Darién y Panamá Oeste.
Se estima que más de 15 millones de moscas estériles se han dispersado desde Panamá Oeste, Coclé, Azuero hasta Veraguas, 590 rastreos y visitas a productores se desarrolla en las zonas identificadas, como parte del operativo que ha emprendido el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) junto a COPEG, para el control y erradicación del Gusano Barrenador del Ganado.
Aseguró que en Capira, en la provincia de Panamá Oeste, la Copeg tiene un corral donde bajan a todos los animales que vienen del este del país hacia el oeste para inspeccionarlos de forma individual.
El brote del insecto se debe a un aparente relajamiento en las medidas de control desde 2019 y, debido a ello, en el país se han detectado más de 3.000 animales afectados.
La mosca Cochliomyia hominivorax adulta, tras aparecerse pone de 200 a 300 huevos en la piel del ganado, los animales salvajes y los seres humanos, con lesiones, que al eclosionar la larva se alimenta del tejido vivo y provoca una gusanera o miasis cutánea.
El Mida insiste en la necesidad de que los finqueros realicen los reportes de animales infestados con el gusano, de modo que los técnicos puedan realizar los rastreos y verificar la existencia o no de gusaneras en fincas colindantes.