Problemas de sequía impulsan a mejorar condiciones de válvulas.
Eva Pérez / publicidadentremes@gmail.com
“En medio de una leve sequía relacionada con el fenómeno de El Niño es muy importante que nosotros tengamos los cuatro juegos de válvulas, que regulan el flujo de agua entre las cámaras de las esclusas en buenas condiciones para cuidar el agua”, afirmó Wilfredo Yau, responsable del programa de mantenimiento en la esclusa de Pedro Miguel.
“Es como cuando tienes el grifo de la casa, si el grifo está goteando se ajusta para que no siga botando, algo similar pero en mayor escala” se hace en el Canal, añade.
Como parte de su programa de mantenimiento de activos críticos, equipos, infraestructuras e instalaciones de la vía acuática, el Canal de Panamá ejecuta el reacondicionamiento de cámara seca en las esclusas de Pedro Miguel.
Cada cámara tiene dimensiones de 1,000 pies de largo, 110 pies de ancho y aproximadamente, 81 pies de profundidad.
Los trabajos consisten en el reacondicionamiento completo de un juego de compuertas, las válvulas y trabajos de acondicionamientos de los muros de la cámara.
Además, “cuando secamos la cámara es la única oportunidad que tenemos para poder ver los muros de concreto y sellar cualquier fisura, grieta o daño que pudiera existir”, añade.
“Estas esclusas del Canal de Panamá tienen más de 100 años en operación y nuestro plan de mantenimiento está definido para extender su vida y tener esclusas por 100 años más”, señaló Miguel Lorenzo, vicepresidente de Infraestructuras e Ingeniería de la vía interoceánica.
Pese a las obras, previstas con antelación, el tráfico por el Canal no se ve afectado.
Los trabajos en esta cámara, con un presupuesto de 2,5 millones de dólares, debían durar según el plan una semana. En este período, más de 400 personas revisan válvulas, muros de unos 20 metros de altura y las alcantarillas por donde entra el agua para subir y bajar los barcos.
La escasez de lluvias ha obligado al Canal a reducir el calado de los buques, en medio de una crisis por el abastecimiento de agua que amenaza el futuro de esta vital ruta marítima.
Según las autoridades, el Canal invierte más de 400 millones de dólares anuales en diferentes proyectos de mantenimiento.