Extracción de agua para beneficios agrícolas, preocupa a residentes.
Eva Pérez / publicidadentremes@gmail.com
El estado actual del río Chame ha sido motivo de discusión a lo interno de la Alcaldía de este distrito, en donde autoridades locales, exigen al Ministerio de Ambiente, no otorgar más permisos de agua con fines agrícolas.
Grupos ambientalistas han comenzado a advertir el descenso en el caudal del río Chame, lo que repercutirá en la reducción de la producción de agua potable en las comunidades que se benefician de este recurso.
La Dirección Nacional de Seguridad Hídrica y la Dirección de Verificación del Desempeño Ambiental, del Ministerio de Ambiente (MiAMBIENTE), ha señalado que se mantienen en constante monitoreo de las represas construidas, para que la Sociedad Estrada Company, S. A., mantenga regulada la extracción de agua, tomando en consideración el bajo caudal que presenta el río Chame y bajen los vertederos a medida que disminuya el caudal de los embalses, garantizando así, el caudal ecológico del río.
La empresa en mención dedicada al cultivo de Sandía para exportación, destacó que utiliza las aguas de estos estanques, para regadíos por goteo regulado1 de sus plantaciones en predios cercanos a la ribera del río Chame.
El peritaje inició con un recorrido desde la toma de agua de la planta potabilizadora del IDAAN para verificar la presa que construyó la institución en vías de garantizar el suministro hídrico al distrito de Chame y las tres (3) presas construidas por la sociedad Estrada Company, señaladas en la denuncia.
El debate culminó en el pleno del Consejo Municipal de Chame con representación de las partes gobiernos locales, empresarios, ambientalistas y quejosos, en donde los técnicos de MiAMBIENTE presentaron un informe sobre el comportamiento que ha tenido el río Chame en los últimos años.
En tanto, para la directora regional del Idaan en Panamá Oeste, Marta Albarracín, la situación aún no es crítica, no obstante, informó que en horas de la noche se paraliza por cinco horas uno de los dos equipos de bombeo de agua cruda, quedando la planta potabilizadora a un 50% de su capacidad.