Dueños de árboles deben poner en práctica técnicas para colaborar en la recuperación del fruto.
Eva Pérez / publicidadentremes@gmail.com
El Marañón en Panamá está sufriendo de un problema sanitario de tipo emergente, que ha provocado el desabastecimiento de producto (marañón y pepita) para su aprovechamiento familiar, falta de materia prima (pepita) para el procesamiento a nivel artesanal y agroindustrial.
El agresivo ataque de la enfermedad a nivel de la madera hace fácil presa del problema sanitario, además de la falta de manejo de estas plantas por desconocimiento de sus propietarios, indicó Melvin Jaén ingeniero Agrónomo Fitotecnista y coordinador del proyecto identificación y manejo de agentes bióticos causantes de problemas sanitarios emergentes en el marañón.
“En realidad no es solo una enfermedad, se trata de varias enfermedades, de las cuales hasta ahora el Instituto de Investigaciones Agropecuarias de Panamá (Idiap) ha definido cuatro principales”, acotó.
La Cenicilla (cuyo hongo causante es el Oidium anacardii) afecta las flores las cuales mueren y no hay frutos, la Antracnosis, producida por el hongo Colletotrichum gloeosporioides, que afecta el fruto en amarre y crecimiento, el manchado Necrótico por el hongo Pestalotia clavispora, la cual causa el manchado de la hoja e induce la caída de hojas y la Resinosis o Cancro por Lasiodiplodia theobromae, se observan manchas negras que segregan un latex negro (hongo que se mueve internamente afectando el tejido vascular de la planta.
Jaén, destacó que actualmente se implementa una Finca Experimental en Río Hato Sur, para trabajar con base la problemática de los Marañones y poder rescatarlo.
Este problema de orden sanitario se viene dando desde antes del 2018.
A juicio del investigador estas enfermedades son un indicativo del poco valor que se le ha dado al cultivo de Marañón, que sólo recobra interés para la época seca por la ausencia del pseudofruto para las bebidas y de las pepitas para comerlas tostadas y preparar algunos dulces típicos de la temporada.
“En estos momentos el trabajo de campo a realizar es evitar productos químicos por ser un es un frutal de traspatio y su manejo debe ser mediante la aplicación de prácticas culturales”, recalcó el ingeniero.
Recomienda para conservar una planta de marañón:
- En árboles de tipo gigante, aplicar solamente la limpieza de la copa con un gancho atado a una vara de bambú y poda sanitaria de las ramas afectadas por el cancro negro.
- En árboles de porte intermedio con el follaje afectado, aplicar poda de los extremos de las ramas, curando las heridas de los cortes con una solución de cobre disuelta en agua y cubrir con pintura.
- Algo interesante que este árbol es tan noble que responde a la oda con floración, pues su fisiología es emisión de ramo floral después de la emisión del ramo vegetativo.
- El azufre también es otro aliado que puede ayudar a proteger la floración y el cuaje de los frutos. Esas aplicaciones es necesario repetirla a los 15 días de la primera.
El investigador dejo claro que este cultivo No es que esté en peligro de extinción, pero existe una realidad que están vulnerables a diversas enfermedades y que el inicio de una plantación en estos momentos es bastante dificultoso, donde las lluvias intensas, la intensidad de la humedad ambiental y el incremento de la temperatura ambiental, juegan un papel importante en la afectación del fruto.
De acuerdo con las cifras estadísticas las provincias con mayor población de árboles de marañón son Veraguas, Coclé, Panamá Oeste. El mejor sitio para su desarrollo vegetativo y comercial está en las provincias integrantes del arco seco, por sus condiciones de suelo y clima.
Mencionó que Panamá trabaja un proyecto bilateral con la República de Brasil, para que apoye con capacitaciones y control de la enfermedad debido a su experiencia por ser el punto de origen del Marañón.
Muy completo ell reportaje , muchos se preguntaban qué y el porqué de la escasez
Gracias