Mal funcionamiento de plantas de tratamiento pone en riesgo a los ríos.
María Osorio / info@entremespanamaoeste.com
Por la implicación que pueda tener las descargas de aguas residuales sobre la calidad del agua que llega al río Caimito, técnicos de Mi Ambiente en Panamá Oeste, realizaron una inspección en diversos proyectos que se desarrollan cerca de la toma de agua de la planta potabilizadora Jaime Díaz Quintero en el distrito de Chorrera.
Según Dalia Vargas, encargada de la sección de Verificación del Desempeño Ambiental, en lo que va del año 2022, en la provincia de Panamá Oeste se han realizado 81 inspecciones de seguimientos a Estudios de Impacto Ambiental, de estas el 85% de las irregularidades detectadas es el mal funcionamiento de las plantas de tratamiento de aguas residuales.
El colapso de las plantas de tratamiento, ponen en riesgo de contaminación a los ríos incluyendo los que están fuera del eje de la cuenca.
La funcionaria hizo énfasis en que cuentan con un cronograma de seguimiento que comprende la fiscalización y control de estos proyectos cada seis meses. Acciones que aseguran el cumplimiento de los estudios de impacto ambiental y las resoluciones que les otorga la viabilidad de los proyecto. “Si el proyecto no cumple con las normas ambientales, se elabora un informe técnico el cual es enviado al área de asesoría legal, para procedimientos administrativos”. acotó Vargas.
Explicó que las verificaciones se fundamentan en la norma ambiental Ley 41 de ambiente y del Decreto Ejecutivo 33 del 26 de febrero de 2007, “Por el que se aprueba la Política Nacional de Supervisión, Control y Fiscalización Ambiental sus principios, objetivos y línea de acción”.
Señaló que estas verificaciones coadyuvan a los registros de la calidad de agua que lleva a cabo el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN) en esta provincia.
La verificación consiste en corroborar que el sistema de tratamiento aprobado en el estudio de impacto ambiental sea construido como fue establecido en dicha herramienta, que el punto de descarga se realice en el sitio aprobado en el estudio, verificar que el afluente de la descarga no presente olores molestos y que cuente con los permisos de descarga otorgados por el laboratorio del Ministerio de Ambiente.